Hemos iniciado el mes de la patria con mucha esperanza y entusiasmo. Es el tiempo en que Chile se prepara para recibir la primavera que va llenando los espacios de color. Hemos compartido los desafíos que nos han fortalecido como comunidad para hacer frente a inesperados escenarios con generosidad y entrega. Hemos crecido en colaboración, flexibilidad y creatividad pero, especialmente, no nos hemos olvidado de poner al centro de todo el cuidado de las personas.
Este aprendizaje es significativo para seguir creciendo como país. La vida y la salud, como algo esencial, han marcado el cuidado de unos a otros. Comprendemos mejor la solidaridad como aquello que nos hace salir de sí mismos para dar espacio a las necesidades de los demás. Probablemente, nos hemos hecho más conscientes de que lo que hacemos o dejamos de hacer impacta al bienestar del otro.
Sigamos avanzando y trabajando juntos colaborativamente en la construcción de una patria grande donde nuestras acciones y actitudes generen plenitud de vida poniendo a las personas en primer lugar. Hoy, desde nuestras casas, seguimos ofreciendo y entregando lo mejor para crecer y hacer realidad nuestros sueños.
Dios bendiga nuestro país, a los que lo habitan y, muy especialmente, a nuestras niñas, niños y jóvenes, protagonistas de un tiempo nuevo y mejor para todos.
José Luis Avilés Radic
Rector