Queridos compañeros de Misión: Hoy celebramos nuestra vocación, el llamado que recibimos un día para ser maestras y maestros de escuela. A pesar de nuestros temores, nos decidimos a cambiar la historia partiendo por dar alas a los niños y a la juventud invitándolos a volar. Agotados después de una jornada de enseñanzas y aprendizajes nos vamos cada día agradecidos por tanto bien recibido y ciertamente contentos por ir gastando la vida en algo que vale la pena… por supuesto que sí. Feliz día de la profesora y el profesor.
Un abrazo cariñoso para todos.

José Luis Avilés Radic
Rector