Apoderados, profesores, funcionarios, ex-alumnos, scouts de nuestro Colegio y colaboradores externos acogieron a decenas de personas de Calera de Tango que llegaron hasta nuestras dependencias para participar en el Apostolado Profesional 2018, una de las experiencias pastorales de mayor impacto en nuestra comunidad.

Esta actividad, que se realiza hace doce años, está dirigida especialmente a personas que tienen dificultad para acceder a los sistemas de salud y también a quienes, por su condición familiar o social, requieren de una mayor atención y compañía.

Fue así como durante la jornada de sábado, la comunidad de voluntarios movidos por su experiencia de fe, se organizaron con la colaboración de Pastoral y brindaron atenciones médicas, pediátricas, oftalmológicas y ginecológicas, acompañamiento integral, y servicios de peluquería, y manicure a los asistentes. La actividad finalizó con un gran almuerzo comunitario.

Agradecemos a todos quienes con su colaboración y entrega hicieron posible este Apostolado que brindó un momento de encuentro, compañía y atención a quienes más lo necesitan.

Testimonios:

Osvaldo Araya, apoderado 1° Básico: “Vine a apoyar a mi señora en el área de medicina. Lo que nosotros hacemos es por un tema de servicio, ya que en forma particular estamos acostumbrados a prestar ayuda médica a quien lo necesite. Es importante que los padres y apoderados participen en estas instancias, porque a veces perdemos el punto de vista al centrarnos en una cierta burbuja. El Apostolado es una actividad sumamente bonita que enriquece mucho y hay una satisfacción muy rica cuando uno ve a la persona que llega con un problema y le ayudamos a resolverlo. Ayudar a las personas te ayuda a ayudarte a ti mismo”.

Matilde Rodríguez, ex-alumna Generación 2017, estudiante de Kinesiología: “El colegio siempre nos ha enseñado e inculcado la ayuda social; eso me marcó mucho y no lo quería dejar de lado, entonces aproveché este Apostolado, porque sentí que tenía que venir, y tratar de vincularlo a mi carrera. Me encanta venir a estas actividades y hay que aprovecharlas para, además, tener la ocasión de volver al colegio”.

María Varas, vecina de Calera de Tango: “Ha sido una actividad hermosa y se lo comenté a la psicóloga que me atendió. Vi al médico general también y me dio una muy buena atención. Me encantó el lugar, todo lindo”.

Marcela Acuña, vecina de Calera de Tango: “Muy lindo todo, es primera vez que vengo y no sabía lo que se hacía; es algo que no se hace en todos los lugares, y es una oportunidad que uno tiene. Me regalaron los medicamentos y me voy muy contenta, porque nos regalonean harto, me siento muy bien atendida”.