Entre el 10 y el 24 de septiembre nuestros estudiantes Renata Basáez Bersezio (II° Medio A) y Benjamín Núñez Van Capel (II° Medio B) vivieron el Curso -Taller Arrupe 6, realizado en la localidad de Villeta, en Colombia, a cargo de Flacsi (Federación Latinoamericana de Colegios de la Compañía de Jesús) con el apoyo de los colegios Mayor de San Bartolomé y Berchmans de Colombia.

Este curso, que se inspira en la espiritualidad y pedagogía ignaciana, busca fortalecer el conocimiento personal, la espiritualidad, el trabajo colaborativo, el discernimiento, el liderazgo y el compromiso con aquellos que más lo necesitan, desde actividades teórico – prácticas de tipo pastoral y regional para los estudiantes de los tres últimos años de escolaridad.

En ese contexto, nuestros estudiantes  fueron elegidos por un grupo de profesores para asistir al curso, lo que les causó gran sorpresa, alegría y expectación.

Renata señala que fueron dos semanas muy intensas donde vivieron, en el contexto del liderazgo ignaciano, diversas actividades donde reflexionaron sobre desigualdad social, valoración y aprecio por la naturaleza y muchos otros. “Es imposible resumir todo lo que enseñan. Lo que más me gustó fue la posibilidad de auto conocernos, porque cuando uno se conoce más, puede dar mejor”, explica.

Por su parte, Benjamín explica que la experiencia disponía los medios para que cada uno pudiera crearla, pero que todos llegaban finalmente a las mismas conclusiones. “Te hacían pensar demasiado y por eso uno mismo se iba dando las respuestas. Hubo un día orientado a la vida desde el nacimiento hasta ahora y fue muy completo y lo que más me gustó”, expresa.

Respecto a los aprendizajes adquiridos en Arrupe, Renata subraya que ahora está más consciente de lo que la rodea y de la situación de las personas, confía más en sí misma y aprendió a valorar el trabajo de los demás y la naturaleza. “Con el curso veo las cosas de una manera más profunda”, acota. En ese sentido, Benjamín coincide con Renata y agrega que haber sido partícipe de clases de oratoria le sirvió mucho para aprender técnicas para expresarse y hablar.

Ambos estudiantes señalan estar muy agradecidos de haber vivido esta experiencia y que ésta les asignó un compromiso de comenzar a cambiar la forma de ver las cosas. “Nosotros ahora estamos llamados a hacer un gran cambio, pero esto lo vemos como un regalo y una oportunidad muy constructiva; sentimos la necesidad de hacer un cambio y debemos hacernos el tiempo para concretarlo”, concluyen.